Oye, Cordero es Agnus Dei? no, no, es el Secretario de Hacienda aquel que está sugestionado de que el pueblo de México puede vivir con un salario de $ 6 000 pesos al mes, porque para él todas las amas de casa de este país se llaman “Doña Bartola” que con $2 pesos pueden vivir cinco miembros de una familia, ósea pagar la renta, el teléfono y la luz y lo que sobre se queda para el gasto. Políticos inconscientes e insensibles han sido la constante de este territorio ¡pobre México, tan lejos de Dios y con tantos políticos…, lejos del pueblo!, ya Chava Flores veía venir el desastre y cochinero en que convertirían estos señores al país, ya en 1957 se alzaban voz y plumas importantes que señalaban la corrupción de funcionarios y, los salarios de miseria en que Vivian y siguen viviendo los trabajadores: “…con esto de la pesada ya ni pa’ que alegamos, Si nos dan por un kilo unos ochocientos gramos, y total…esos señores que según toda la gente los hace llamar inspectores, dizque controlan los precios, las pesas y las medidas, también se quedan callados cuando reciben mordidas. pero, hay que comprender, te diré porque hacen eso, les pagan tan pocos pesos que los obligan a morder, Y quiero hacer ver fuera de todo relajo, tienen un sueldo tan bajo que no alcanza ni pa’ comer, ahí, tuerce la puerca el rabo y lo vuelve a retorcer…” (Cap. Raúl Rodríguez Carreón)
El Lic. Ernesto Cordero esta sugestionado y convencido de que los moradores del país no piensan, no razonan, no investigan y al creer que es un hombre iluminado por la gracia de Agnus Dei ya se ve sentado en la silla Presidencial. Imagínense ustedes a este señor como Presidente, si para el no existen pobres en este país y señala entre otras atrocidades que la gasolina es la más barata del mundo, porque compara la misma con la de Estados Unidos, la del Reino Unido y Canadá, pero su omisión mas fraudulenta en estos temas y otros, es que no compara los salarios de los trabajadores de estos países con lo que queda de este país. Señor Eterno mira a esta Nación y no permitas que llegue este berrendo a gobernarnos. (Perdón… Cordero)
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